Porto Alé
Porto Alé
Porto Alé es una cervecería-restaurante situado en un emplazamiento privilegiado frente al mar, al inicio de un pequeño dique, con el Castillo de Santa Cruz al frente y Coruña al otro lado de la ría. Porto Alé es un espacio íntimo e idóneo para eventos, al estilo de una tasca marinera reinventada, sencilla y luminosa, con unas puestas de sol increíbles.
Cuenta con una amplia variedad de cervezas, empezando por sus ocho grifos de diferentes estilos, vinos de pequeñas bodegas seleccionadas, bebidas no alcohólicas, cócteles y combinados.
Hace poco, un grupo de amigos y yo nos refugiamos allí, y tengo que decir que lo pasamos genial y comimos de lujo. El lugar está dirigido por Marta, una emprendedora con una pasión contagiosa por la cocina. A pesar de que era un día lluvioso y el mar estaba muy agitado, las olas llegando hasta la terraza añadieron un toque especial a la experiencia. Fue una auténtica gozada. El ambiente es tan cálido y agradable que ni el mal tiempo puede arruinar el momento.
Ese día, había una exposición de arte de Álvaro Dorda, cuyas obras llenaban el espacio con colores y emociones. Además, dos chicos pinchaban música (Fito Original Crew y Smallface), creando una atmósfera vibrante y llena de energía. Para los amantes de la música en vinilo, Nonito Pereira estaba allí vendiendo sus discos, lo que añadió un toque especial y nostálgico a la tarde.
Más información aquí: Porto Alé.
Su cocina incluye propuestas tanto tradicionales como vanguardistas, como una reinterpretación de las tostas nórdicas que tradicionalmente acompañan la cerveza en Dinamarca, elaboradas por Manu Barberena. Manu trabajó durante años en el Brewpub de la conocida marca de cerveza artesanal TOØL y ahora propone en Porto Alé una oferta de comida sencilla, variada y sin fritos.